Una vez alcanzados los objetivos de la investigación de un antepasado o una rama de la familia en particular, muchos investigadores deciden transformar los nombres, los hechos y las fechas en una historia interesante. Tal vez quieran hacerlo más ameno para las generaciones futuras, o quizás quieran convertir la historia en un relato de ficción que pueda publicarse como cuento o novela. En este artículo, te daré algunas herramientas para transformar tu investigación sobre historia familiar en un cautivador relato.
Para ello, te propongo una serie de herramientas.
Antes de empezar, te sugiero que investigues a todos los parientes que preveas incluir en tu obra, aunque vaya a ser ficción, y que consultes a cualquier familiar vivo que planees incorporar para preguntar si hay alguna información que preferirían mantener en privado. Quieres disfrutar de la escritura, pero no deseas que nadie se sienta incómodo revelando información confidencial.
Aplicar la investigación para crear una historia
Te recomiendo abordar tu historia familiar como si fuera una obra de ficción. Esto hará que la lectura sea más convincente a medida que se conecta con tus antepasados – y tiene la ventaja añadida de que te dará una mejor comprensión de sus acciones dentro de su marco de tiempo histórico.
Utilicé el siguiente esquema como un método para ayudarme a clasificar y organizar los hechos mientras escribía la historia de mi propia familia. Por favor, siéntete libre de modificar estos consejos para que te funcionen.
Recopilación de datos
Cuando escribí mi primer relato histórico, me sentí abrumada por la cantidad de información que debía recopilar. Mantén tus archivos ordenados y etiquetados. Yo utilicé una combinación de notas adhesivas y fichas. No te olvides de numerar las fichas: no hay nada más frustrante para trabajar que un revoltijo de datos desordenados.
Definiendo a tus personajes
Cuando empieces tu historia, menciona siempre el periodo de tiempo -por ejemplo, la Segunda Guerra Mundial- y recopila todos los datos históricos que puedas antes de insertar a tus personajes principales.
Métete en la piel de tu héroe/heroína y pregúntate:
- Dónde nacieron los miembros de la familia. Por ejemplo, si sus raíces están en un país extranjero, sus escenarios ayudarán a dar más profundidad a tu historia, especialmente si los hechos ocurrieron durante una época de guerras y contiendas.
- ¿Qué edad tengo cuando comienza la historia? La gente empatizará con un niño que crece en medio de la batalla.
- ¿Qué edad quiero tener cuando termine la historia?
- ¿Cúal es mi aspecto físico? Por favor, no te pases en esto. No necesito saber que la heroína tiene los ojos violeta de Elizabeth Taylor o la barbilla hendida de Cary Grant.
- ¿Qué hay en mi armario? Sé fiel a la época. Las zapatillas Reebok no encajan en la Primera Guerra Mundial.
- ¿Qué me gusta comer y dónde me gusta cenar? De nuevo, la comida rápida es específica de los dos últimos siglos, y además debes tener en cuenta los ingresos y el empleo de tu personaje.
- ¿Cuál es tu visión del mundo en el que vives? Sé cuidadoso, debe encajar con la época de tu libro.
- ¿Qué es lo más importante para ti en una relación? Los tiempos han cambiado. Recuerda la época sobre la que estás escribiendo y retrata a tus personajes con precisión.
- ¿Cómo manejas las buenas noticias y las malas situaciones?
- Situaciones peligrosas: Si alguien viniera hacia ti con un arma, ¿sabrías defenderte?
- Mascotas: ¿Qué tipo de animales tenían las personas de esa época y cuál era la actitud de la gente hacia los animales domésticos? En muchos países, se ganan el sustento y no se consideran animales de compañía.
- Amigos y familia: ¿qué siente tu personaje por ellos?
- Parejas e hijos: ¿Los quieres? No cases a tu personaje al principio y lo tengas listo para abandonar a uno o a ambos a mitad del libro. De nuevo, piensa en cómo se percibían el matrimonio y los hijos en la época.
- Aficiones: ¿Tu personaje comienza siendo un tímido ratón de biblioteca que se arma de valor para salvar vidas, o es un alma valiente que tiene un incidente desafortunado y se retira a un rincón a la primera señal de peligro?
- Viajar: ¿Tu personaje prefiere quedarse donde está, o tiene una necesidad de vivir aventuras en otros países que influirá en sus acciones?
- Cultura: ¿A tu personaje le gustan los museos y las galerías de arte o se siente más cómodo pasando un sábado acurrucado con un buen libro?
- Libros: ¿Tu personaje es un intelectual o se inclina más por una novela gráfica o una obra de época?
- Emociones: ¿Tu personaje llora al ver a un niño/animal herido o tiene una fría actitud hacia cualquiera de ellos?
- Explora a tu personaje para obtener respuestas a todas estas preguntas.
Elementos de la historia
El momento oscuro
Debes hacer que tus personajes sigan avanzando. Utiliza toda la información anterior para llevarle hasta el Momento Oscuro, cuando todo parece perdido.
Los elementos de la historia que conducen a EL FINAL
Haz que cada palabra cuente para que los lectores quieran seguir leyendo. No te atasques tanto en descripciones y detalles que te olvides de hacer avanzar la trama.
Crecimiento
Tu héroe/heroína tiene que experimentar algún tipo de cambio desde el principio hasta el final de tu historia (también conocido como arco de personaje).
Conflicto
Tu historia necesita algún tipo de fricción, tensión o conflicto para hacer avanzar la trama. La mejor forma de lograr las tres cosas es con un villano digno que se oponga a lo que el protagonista intenta hacer. Una vez más, hay que proceder con cautela. Es posible que quieras utilizar un nuevo nombre para proteger la verdadera identidad del villano si su revelación va a estresar a un familiar que lea tu historia.
Descripciones y ambientación
Descripciones de personajes
Asegúrate de saber cómo son tu héroe/heroína y tu villano, y ten a mano sus descripciones mientras escribes. A menudo es más fácil escribir si puedes describir los rasgos faciales de un personaje.
Descripción de escenarios
También es una buena idea tener a mano las descripciones de ambientación -y asegúrate de verificar la exactitud histórica de las descripciones que tienes de los lugares en los que tu personaje puede pasar tiempo, incluyendo casas, restaurantes, librerías, farmacias, etc.-. Una vez que empieces a escribir, te ayudarán a tener varios lugares más claros en tu mente. A menos que planees mantener a tu personaje en un área confinada durante la duración de la historia, como ya se ha mencionado, deberías tener fotos de lugares con fechas en las que la acción/escenas tengan lugar.
Te he dado la arcilla. Ahora, moldéala y dale forma en una historia que conecte con los lectores porque te has tomado el tiempo para incorporar todos los elementos que son parte integral de tu época y los lugares de la historia de tu familia.
